De acuerdo con todo esto, esperaríamos ver mucho azul, morado, rosa y negro en los logos de salud, y encontrar poco naranja, amarillo y rojo.
En realidad, lo que encontramos es mucho azul, con pequeñas dosis de blanco, verde, gris y negro. El azul se percibe mayoritariamente como serio y maduro, así que concuerda con las necesidades de las firmas del sector. Las compañías se apoyan en el blanco para reafirmar su asociación con la pureza y la higiene. Y el verde representa crecimiento, frescor, equilibrio y naturaleza: características que suman mucho para las compañías sanitarias, especialmente para aquellas que se centran en estilos de vida natural y orgánica. Sin embargo, el rosa y el morado en los logos en salud apenas se encuentran.
A pesar de que no esperábamos encontrar el rojo en mucho logos (es el color de la sangre al fin y al cabo), lo encontramos muchas veces en empresas de distribución. Además, su asociación con el peligro puede convertirse en una ventaja: la Cruz Roja americana, por ejemplo, utiliza el rojo para simbolizar una llamada urgente a la acción en situaciones de emergencia.